Manifiesto por el Día Internacional del Pueblo Gitano 2024
Hoy nos reunimos en un espíritu de solidaridad y reconocimiento, celebrando el Día Internacional del Pueblo Gitano. El día 8 de abril de cada año conmemoramos el Primer Congreso Mundial Gitano que tuvo lugar en Londres en 1971. Durante este congreso, se instituyó la bandera y nuestro himno gitano, el Gelem, gelem (anduve, anduve). Pero este día no sólo marca una fecha en el calendario, sino que representa un recordatorio de la rica historia, las tradiciones arraigadas y la interesante cultura del pueblo gitano en todo el mundo. Es una oportunidad para reflexionar sobre los desafíos que enfrenta el pueblo gitano y reafirmar nuestro compromiso con la igualdad, la justicia y la inclusión.
Se acerca el 600º aniversario de la llegada a la Península, el próximo 2025, y a pesar de ello, los gitanos y las gitanas seguimos siendo un pueblo esencialmente desconocido. Y en ese desconocimiento habitan los prejuicios, los recelos y, por ende, el rechazo y la discriminación que convierten al pueblo gitano en la minoría más repudiada socialmente en toda Europa.
Historia: Durante siglos, el pueblo gitano ha navegado por caminos desconocidos, llevando consigo su identidad única y su espíritu resiliente. Originarios de la India, los gitanos emprendimos un viaje migratorio que nos llevó a través de Europa y más allá, enfrentando discriminación, persecución y marginación en el camino. A pesar de estos obstáculos, hemos preservado una cultura, un idioma y unas tradiciones, tejiendo una red de comunidad que trasciende fronteras geográficas.
Símbolos: Nuestra identidad está tejida con hilos de símbolos poderosos que reflejan nuestra historia y valores. La rueda romaní, con sus rayos que representan los diferentes caminos que hemos recorrido, simboliza nuestra migración constante y nuestra resistencia ante la adversidad. La bandera gitana, con su fondo azul y rueda roja, es un emblema de nuestra unidad y determinación para perseverar.
Hoy, como cada año, llevaremos a cabo la ceremonia del río, el pueblo gitano nos reunimos en sus orillas y con nuestras manos llenas de pétalos de rosas las arrojaremos a las tranquilas aguas para honrar a nuestros ancestros, ofrecer oraciones y liberar simbólicamente las cargas del pasado en las aguas que fluyen con serenidad. Es un momento de reflexión y renovación, donde el fluir del río nos recuerda la importancia de dejar atrás lo que nos pesa y abrirnos al futuro con esperanza, ilusión y determinación.
Tradiciones y Cultura: Nuestras tradiciones y cultura son el alma de nuestro pueblo. Desde la música, hasta las artesanías y la gastronomía, cada aspecto de nuestra vida está impregnado de una rica herencia cultural que también hemos cedido al global del pueblo extremeño. Técnicas, comercio, artesanía, textiles han sido valorados en muchos países. Nuestros conocimientos han sido transmitidos de generación en generación y han contribuido al patrimonio cultural y al bienestar de las regiones donde residimos los gitanos.
Nuestra música, como el flamenco, nos conecta con nuestras emociones más profundas y nos permite expresar nuestras alegrías y nuestras penas. Nuestras historias transmiten la sabiduría de generaciones pasadas, recordándonos quiénes somos y de dónde venimos. A través de nuestra historia, los gitanos hemos demostrado una notable resistencia y resiliencia frente a la adversidad y la discriminación. Nuestra capacidad para mantener una identidad cultural y nuestro sentido de pueblo unido a pesar de las dificultades ha inspirado a muchas personas y ha contribuido a la lucha por la justicia y la igualdad en todo el mundo.
Reivindicación: En este día, también reafirmamos nuestra lucha por la igualdad y la justicia.
Aunque en las últimas décadas se han producido avances significativos en derechos y oportunidades, hoy en día siguen existiendo situaciones que requieren la atención de los poderes públicos. Los gitanos y las gitanas continuamos aún sobrerrepresentados en la pobreza, con una grave desigualdad educativa que limita nuestras oportunidades laborales de futuro, y con situaciones de segregación, tanto escolar como residencial.
Los poderes públicos deben ser firmes en su compromiso por seguir luchando contra una profunda injusticia que dificulta el avance del pueblo gitano: la discriminación, y deben ser coherentes para garantizar que las políticas públicas contribuyen a reducir las desigualdades sociales y favorecen la plena inclusión de la población gitana desde la celebración de la diversidad y el respeto a nuestra historia y nuestros valores culturales.
Exigimos el reconocimiento pleno de nuestros derechos como pueblo, incluida la participación política. En particular, abogamos por la creación de consejos municipales del pueblo gitano, como órganos de participación que nos permitan tener voz en las decisiones que afectan nuestras vidas y nuestro pueblo. Es hora de que se nos escuche y se nos incluya en todas las esferas de la sociedad.
Y para que se nos escuche, los medios de comunicación tienen un papel vital en la promoción de una imagen equilibrada y auténtica de nuestro pueblo gitano. A través de la difusión de los aspectos positivos, como su rica cultura, tradiciones arraigadas y valiosas contribuciones a la sociedad, los medios pueden desafiar estereotipos y prejuicios profundamente arraigados. Al destacar historias de éxito, talento y resiliencia dentro de la comunidad gitana, los medios no solo ofrecen una plataforma para celebrar la diversidad, sino que también fomentan la comprensión mutua, la tolerancia y la inclusión. Reconocemos el poder de los medios de comunicación para influir en la percepción pública y llamamos a una representación justa y precisa del pueblo gitano en todas las formas de medios, con el fin de construir puentes de empatía y solidaridad en esta sociedad global.
Unidos en la Diversidad: En última instancia, somos un pueblo diverso y vivo, unido por nuestro patrimonio común y nuestra cultura compartida para construir un futuro mejor para las generaciones venideras. En este Día Internacional del Pueblo Gitano, elevamos nuestras voces en solidaridad y celebración, recordando al mundo nuestra presencia y nuestra contribución invaluable a la humanidad.
¡Honor y gloria al pueblo gitano en su día!
¡Rromano Chib! (¡Viva el pueblo gitano!). Satipen